Nuwa: la tejedora del Cielo y madre de la humanidad
- 12 nov
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El arquetipo del principio femenino consciente que cura, une y reordena.

En la antigua mitología china, Nuwa (女娲) ocupa un lugar esencial como madre creadora y protectora de la humanidad. Las primeras referencias a su figura aparecen en textos de la dinastía Han (siglo II a.C.), aunque su culto es anterior, probablemente derivado de tradiciones neolíticas del valle del río Amarillo. Nuwa representa el principio femenino de la creación, el poder que da forma, protege y repara.
La que modela la vida
Uno de los relatos más antiguos cuenta que Nuwa moldeó a los primeros seres humanos con barro, insuflándoles vida con su propio aliento. Este gesto la distingue de los dioses creadores de otras culturas: no crea desde la distancia o la autoridad, sino desde la proximidad y el cuidado Su materia es la misma que la nuestra —tierra y agua—, lo que subraya la unidad entre la humanidad y la naturaleza.
En los antiguos templos dedicados a Nuwa, se la representaba con el cuerpo serpentino, símbolo de la energía vital que se enrolla y fluye, conectando el cielo y la tierra. Esa imagen contiene ya la idea de un eje energético, de una corriente que une los planos visibles e invisibles de la existencia.
La que repara el orden
El segundo gran mito de Nuwa narra el colapso del cielo y la tierra tras una guerra entre divinidades. Las montañas se hundieron, el fuego se desató y las aguas del norte inundaron el mundo. Nuwa, movida por compasión, fundió cinco piedras de colores y restauró la bóveda celeste, reparando también los pilares que sostienen el universo.
Su acto no es sólo cosmológico: es ético y simbólico. Nuwa representa la fuerza que restaura el equilibrio cuando el orden se rompe, tanto en el mundo externo como en el interior del ser humano. Es la que reconstituye el eje, el canal que permite que el flujo del cielo y de la tierra vuelva a circular. En medicina china y Qi Gong, el canal extraordinario Chong Mai.
Junto a Fuxi
En muchas representaciones antiguas, Nuwa aparece junto a Fuxi, su contraparte masculina, con quien sostiene una escuadra y un compás (símbolos de orden, medida y creación). Ambos son considerados los padres civilizadores: a Fuxi se le atribuye la invención de los trigramas del I Ching, la escritura y la música; a Nuwa, la creación de la humanidad y la restauración del mundo. Juntos forman el símbolo del yin y el yang en equilibrio dinámico, con sus cuerpos serpentinos entrelazados formando una espiral ascendente.
Su unión expresa una idea central del pensamiento chino: la complementariedad de las fuerzas creadora y ordenadora, la energía que da vida (yin) y la que estructura el movimiento (yang).
Nuwa y el eje de la práctica
En el contexto del Qi Gong, Nuwa puede entenderse como la energía que repara el eje interno cuando se ha fragmentado. Así como ella recompuso el cielo roto, nosotros restauramos la continuidad del flujo vital cuando el cuerpo y la mente vuelven a alinearse. La imagen de Nuwa descendiendo a la tierra y tejiendo el cielo puede verse como una metáfora del movimiento descendente y protector del canal central, el lugar donde la energía celeste se enraíza en la vida.
Practicar con esta conciencia es recordar que el equilibrio no se impone: se restaura. Y esa restauración, igual que el gesto de Nuwa, comienza siempre desde el cuidado y la presencia.
El Chong Mai: el “Vaso de Penetración” o “Canal Central”
En la tradición del Qi Gong y la medicina energética, el Chong Mai es uno de los ocho vasos extraordinarios (qi jing ba mai), los canales más antiguos y primordiales del cuerpo. La palabra “chōng” (衝) significa “penetrar”, “atravesar”, “impulsar”, y también “eje” o “columna interior”. Por eso, el Chong Mai se traduce como “Vaso Penetrante”, “Canal Central” o “Eje vital”.
Su función principal es conectar el Cielo y la Tierra dentro del ser humano, uniendo los tres centros —Dan Tien inferior, medio y superior— y permitiendo la circulación vertical de la energía original (yuan qi).
Función energética
El Chong Mai:
Regula el flujo de la energía ancestral (yuan qi) en todo el organismo.
Nutre la sangre y la médula, y conecta la energía sexual con la espiritual.
Actúa como eje vertical, ayudando a mantener la alineación entre cielo y tierra.
Es el canal de la evolución interna, el camino por el cual el ser humano “se eleva” espiritualmente sin perder su raíz en la tierra.
Cuando el Chong Mai está equilibrado, la persona siente centrado, coherencia interior, alineación y propósito vital.
En la alquimia interna (Nei Dan)
En los procesos alquímicos, el Chong Mai es el canal que se “despierta” cuando los tres Dan Tien comienzan a comunicarse.
Es el canal de la transformación, donde la energía sexual (jing) se refina en energía vital (qi), y ésta en conciencia (shen).
Es también el camino del despertar: el eje que une la raíz y la coronilla, el yin y el yang, la tierra y el cielo dentro de uno mismo.
En muchas prácticas, este canal se representa como una columna de luz que atraviesa el cuerpo desde el perineo hasta la parte superior de la cabeza. Cuando se activa, se experimenta una sensación de unidad, apertura y expansión de la conciencia.
La unión posterior: el mito dual Nuwa y Fuxi
Durante la dinastía Han (siglo II a.C.), los mitos de ambos se fusionan. Las imágenes de bronce, cerámica y los grabados de tumbas los muestran juntos, con:
cuerpos de serpiente o dragón entrelazados,
y en las manos, la escuadra (Fuxi) y el compás (Nuwa), símbolos de orden cósmico y armonía.
Esta iconografía los convierte en una pareja primordial, comparables a Yin y Yang, Cielo y Tierra, o incluso Adam y Eva, aunque con un sentido más circular y equilibrado.
En nuestra práctica que Qi Gong, utilizando este mito de equilibrio entre estado yang y estado ying podemos incorporar el flujo energético bidireccional por el canal central. Podríamos ver a Nuwa como el flujo restaurador del eje interno (Chong Mai) y a Fuxi como la conciencia que ordena y da sentido al movimiento de los lo material.
Juntos, ellos tejen el equilibrio que el practicante encarna entre materia y espíritu.








No sabía casi nada de de esto, solo conocía a Fuxi 😯
Muy buen artículo para conocer la mitología y para aplicar en la práctica interna del Qi Gong